Los hantavirus son una familia de virus potencialmente mortales transmitida principalmente por roedores contagiados. En el continente americano, este virus se conoce como el hantavirus del “Nuevo Mundo” y puede llegar a provocar el síndrome pulmonar por hantavirus (SPH), y como hantavirus del “Viejo Mundo” en Europa y Asia, pudiendo causar fiebre hemorrágica con síndrome renal (HFRS).
La infección se produce al entrar en contacto con los excrementos, orina, saliva o polvo procedente del nido de un roedor infectado. Cada serotipo de hantavirus es específico de una especie de huésped de roedor concreta.
- Manifestaciones clínicas1,2
Los síntomas iniciales de la enfermedad son similares a los de la gripe: escalofríos, fiebre y dolor muscular, pero puede empeorar con rapidez y provocar dificultad para respirar, tos seca, dolor de cabeza, náuseas y vómitos.
El síndrome pulmonar por hantavirus (SPH) tiene un periodo de incubación de 1-8 semanas tras la exposición a la fuente de infección, lo síntomas iniciales son los citados anteriormente, pero en caso de que la enfermedad no sea resuelta, aparecen los síntomas tardíos: dificultad respiratoria e inundación de los pulmones con agua. El SPH puede resultar fatal, con una tasa del 38% de mortalidad. La fiebre hemorrágica con síndrome renal (HFRS) está causada por hantavirus de la familia Bunyaviridae, e incluye enfermedades clínicamente parecidas como la fiebre hemorrágica coreana, la fiebre hemorrágica epidémica y la nefropatía epidémica. El periodo de incubación es de 1-2 semanas, los síntomas iniciales son los citados previamente, y pueden evolucionar a fuga vascular, presión arterial baja e insuficiencia renal. La tasa de mortalidad es menor, entre el 1-15% de los casos.
