Viajeros con enfermedades crónicas 1
Los viajeros con enfermedades crónicas pueden sufrir un mayor estrés debido a las demandas físicas del viaje. Sin embargo, con una adecuada preparación, estos viajeros pueden disfrutar de manera segura de sus viajes.
Por ello las personas afectadas por un problema de salud crónico deberán tener en cuenta los siguientes principios:
- Visitar con antelación a su médico para asegurar que la enfermedad está adecuadamente controlada.
- Preparar un botiquín con la medicación necesaria, acompañada con un informe médico.
- Permanecer hidratado, usar ropa suelta y caminar y estirar las piernas con frecuencia durante viajes de avión de larga distancia.
Dolencias que incrementan los riesgos sanitarios 1
- Enfermedades cardiovasculares
- Enfermedades renales
- Diabetes
- Enfermedades respiratorias
- Cáncer
- Enfermedad trombótica
- Enfermedades inflamatorias intestinales
- Enfermedades autoinmunes y reumáticas
Viajeros alérgicos 1
Los viajeros con reacciones alérgicas severas pueden requerir atención médica urgente durante el viaje. La preparación previa puede reducir los riesgos de sufrir reacciones alérgicas severas.
Algunas recomendaciones son las siguientes:
- Solicitar un informe médico con información sobre el estado de salud del viajero.
- Buscar información sobre los servicios de emergencia en el lugar de destino.
- Llevar un brazalete identificativo médico.
- Advertir de las alergias alimentarias antes de pedir comida o bebida.
- En caso de alergias ambientales, reducir la actividad al aire libre y llevar encima tratamiento para el asma.
